Los estudios clínicos realizados a miles de pacientes diabéticos en todo el mundo han demostrado una serie de beneficios que hacen de la espirulina un suplemento nutricional seguro para la ingesta diaria de los pacientes diabéticos. Muchos médicos convencionales ya reconocen los poderosos efectos de la espirulina para la diabetes y la recomiendan a sus pacientes como un medio para mejorar su bienestar e incluso superar esta enfermedad hasta cierto punto. Así que, sin más dilación, a continuación se enumeran algunos de los beneficios más notables de la espirulina para los pacientes diabéticos.
LA ESPIRULINA REDUCE LOS NIVELES DE AZÚCAR EN LA SANGRE DE FORMA NATURAL
Un estudio a largo plazo realizado hace más de 30 años entre 1297 pacientes con diabetes tipo 1 produjo una mejora enorme en tan solo un año. Se demostró que equilibraba los niveles de azúcar en
sangre y prevenía los efectos secundarios de la enfermedad.
LA ESPIRULINA REFUERZA EL EFECTO DE LA INSULINA
Un estudio publicado en 2013 examinó el efecto antidiabético de la espirulina en pacientes
diabéticos. Los investigadores utilizaron extractos de ficocianina de la espirulina, el antioxidante que le da a la espirulina su fuerte color azul.
El estudio llevó a los investigadores a la conclusión de que la ficocianina presente en la espirulina estimula la función de la insulina en el organismo, mejora la resistencia a la insulina de los tejidos periféricos y regula el metabolismo lipídico del paciente. Por tanto, está dotada de un amplio potencial terapéutico para la diabetes tipo 2.
LA ESPIRULINA PREVIENE Y MEJORA LA NEUROPATIA CONDICIONES
Otro estudio, publicado en 2015, llevó a los investigadores a declarar que la espirulina como suplemento dietético es particularmente eficaz en el tratamiento de la degeneración neurológica, incluido el tratamiento y la prevención del daño neurológico que conduce a la nefropatía diabética (y otras enfermedades degenerativas como la enfermedad de Parkinson). La
sensación de escozor, el entumecimiento, la parálisis y el deterioro funcional de las extremidades se vieron afectados favorablemente cuando la ingesta de espirulina equilibró los niveles de azúcar en el cuerpo.
El estudio concluyó que el efecto de la ficocianina en la espirulina también conduce a una mejora significativa en el tratamiento y la prevención de la neuropatía diabética.
LA ESPIRULINA REDUCE LA GRASA DEL HÍGADO
El hígado graso es una de las enfermedades hepáticas más comunes en Occidente. Sus efectos secundarios conducen casi inevitablemente a la diabetes, sobre todo en pacientes obesos. El consumo de espirulina ayuda a que el organismo supere la tendencia a oxidar las grasas y refuerza la sensibilidad del organismo a la insulina, consiguiendo un estado de equilibrio.
El último estudio, publicado en enero de 2016, muestra cómo la espirulina provocó una mejora en
la resistencia a la insulina (diabetes) y condujo a una reversión completa de la condición diabética en la que los lípidos del hígado, los riñones y las células del corazón se oxidan y provocan lesiones.
Los antioxidantes de la espirulina son tan poderosos que pueden prevenir la oxidación de los lípidos.
LA ESPIRULINA AYUDA A CICATRIZAR HERIDAS Y ÚLCERAS Y RESTAURA LOS VASOS SANGUÍNEOS
Otro estudio examinó los efectos de la espirulina en la curación de heridas, un problema común en los diabéticos tipo 1. Los investigadores vieron un potencial terapéutico excepcional y alentaron a
seguir con el consumo de espirulina y a realizar más investigaciones para maximizar el potencial de las algas verdeazuladas en los diabéticos.
ALGUNAS COSAS A TENER EN CUENTA
También debes tener en cuenta que este artículo no recomienda interrumpir el tratamiento médico que te han recetado y tomar espirulina en su lugar. Si estás probando la espirulina por primera vez, comienza con 1 gramo al día y añade otro gramo cada día.
Los pacientes diabéticos deben tener mucho cuidado con la calidad de su espirulina. Recomendamos comprobar siempre las fuentes y opte únicamente por espirulina de alta calidad.